El estudio de las Lacs ha sido una experiencia ardua y al mismo tiempo fascinante, ya que pueden compartir varios síntomas, pero al mismo tiempo cada una de ellas es diferente, tiene su peculiaridad y parece manifestar la esencia de la especie a la que pertenece.

Iniciamos este camino con el Dr. Zalman Bronfman que supo conducirnos y entusiasmarnos en el estudio de Las Lacs. La leche de la hembra de cada especie es esencial para que sus hijos, puedan sobrevivir y en última instancia para la conservación de la especie en su conjunto. 

En el reino animal, el sobrevivir depende de la capacidad de la especie para defenderse de otros depredadores, de la necesidad, la codicia, o el temor a la pelea. “Todas las leches deberían ser potentizadas, son nuestros mejores remedios; son productos animales y alimentos vitales primarios de los animales, correspondiendo por consiguiente a nuestra naturaleza física más profunda. Si tuviésemos pruebas cabales de la leche de mono, de vaca, de yegua y de mujer, las mismas serían de gran valor.”

Este pensamiento avanzado de Kent nos permite contar en la actualidad con los remedios de las leches, que tal vez como ocurrió con Lac caninum se conviertan en muy buenos medicamentos cuando probemos sus efectos terapéuticos.